¿Tengo problemas de ansiedad?

El Inventario de Ansiedad de Beck es una herramienta útil para valorar los síntomas somáticos de ansiedad, tanto en desórdenes de ansiedad como en cuadros depresivos. Sus respuestas serán confidenciales, así que sea honesto por favor.

Responda este cuestionario considerando sus dificultades actuales. Considere como referencia las dificultades que ha tenido esta última semana.

Acerca de la ansiedad…

Miedo. Pánico. Fobia. Preocupación. Nerviosismo. Todos nombres relacionados con la más inquietante de las emociones humanas, la ansiedad.

La ansiedad es un estado emocional en el que las personas se sienten inquietas, aprensivas o temerosas. Todos nos sentimos ansiosos a veces. Cuando ésta es muy intensa o persiste en el tiempo, puede tener relación con un trastorno ansioso y es importante recibir el tratamiento adecuado para aprender a manejarla.

La ansiedad envuelve reacciones físicas, pensamientos, sentimientos y comportamientos determinados. Algunas de las reacciones físicas son: el corazón late aceleradamente, manos sudorosas, tensión muscular, mejillas sonrojadas y aturdimiento. Los pensamientos que suelen surgir son de índole catastrófica, sobrestimación del peligro, subestimación de la propia habilidad para afrontar y de la ayuda disponible. Las emociones que afloran junto con la ansiedad suelen ser el nerviosismo, el miedo, el pánico y la irritabilidad. Por último, los comportamientos que suelen llevarse a cabo con el fin de aminorar la ansiedad son el tratar de controlar las situaciones para prevenir el peligro, evitar situaciones donde puede surgir ansiedad, irse de situaciones en las que comienza a aparecer la ansiedad y apuntar a la perfección para controlar las distintas situaciones.

Por mientras te dejamos algunos consejos que pueden ayudarte:

• Acepta la ansiedad. A veces “nos preocupamos porque nos estamos preocupando” esto genera una bola de nieve aumentando nuestra ansiedad inicial.
• Aprende a vivir el “aquí y el ahora”. Las personas ansiosas tienden a vivir con la cabeza entre el pasado y el futuro. Para combatir la ansiedad, es importante aprender a centrarse en el presente. Respira, mira a tu alrededor y nota que no está sucediendo nada malo ahora mismo. Disfruta de ello.
• Como la ansiedad causa que la respiración se vuelva menos profunda o irregular, controlar la respiración puede ayudarte a manejar esta tendencia y evitar el desbalance entre oxígeno y dióxido de carbono que puede exacerbar los síntomas físicos de la ansiedad. Simplemente inhalando lentamente en 4 tiempos y exhalando también lentamente en 4 tiempos por tres minutos puede ayudar a relajarte físicamente.
• Distráete. La distracción te sirve para cambiar tu foco de atención desde las sensaciones físicas o pensamientos que se tienen generalmente cuando uno está ansioso. Aquí te dejamos algunos ejemplos:

– Si estás en casa ordena un cajón, lee un libro o envíale un mensaje a un amigo.

– Si estás en la calle puedes contar los autos rojos que ver pasar o los objetos que comienzan con la letra “T”.

– Focalízate en algo con mucho detalle: una planta, o la silla en la cual estás sentado. Descríbela mentalmente, su color, sombras, texturas.

– Visita mentalmente un “lugar feliz” (un recuerdo de un buen momento en el pasado).